martes, mayo 16, 2006

soledad, como me miras desde los ojos de la mujer de ese cuadro...

parece que este gato ya se quedó sin dueño.

lo que me duele no es tanto que se hayan roto en mi pedazos mis ilusiones.
las ilusiones son para eso.
lo que me duele no es tanto que te hayas alejado sin que sepa por qué

sino que mi instinto me lo decía y yo como una ingenua seguí creyendo en tus falsas palabras.
que serías fiel, que serías leal, que me dirías de frente cuando no quisieras estar conmigo. que no eras como los demás.

qué ingenua.

me viene a la mente aquella fiesta en que te pasaste toda la noche diciéndome por qué debería aceptar estar contigo.

recuerdas lo que te dije en aquel viaje a Querétaro? bueno, si me hubieras hecho caso las cosas serían diferentes. tal vez todavía tendríamos una relación. o por lo menos no dolería tanto lo que está pasando.

y lo único que dices es no presiones.

chale, ya había escuchado eso antes.

justo esta mañana le decía a el teacher porno que nunca podría haber nada entre nosotros porque yo estaba contigo.

d u e l e

me estoy tragando mis lágrimas...
no pensaba que fuera tanto lo que ya sentía por ti.
no debí permitirme que llegara tan lejos.

lo verdaderamente doloroso es que por un momento pensé que podía ser feliz con alguien. contigo.

5 ecos:

lagartija dijo...

LAS GASTADAS PALABRAS DE SIEMPRE

Déjame recordarte las gastadas palabras de siempre,
los armarios que encierran la humedad de los puertos
y el sabor a betel que dejas en mis labios
cuando desapareces en el aire.
Déjame tender tu cabello a la sombra
para que la penumbra madure como el día.
Déjame ser una ciudad inmensa, un bote de cerveza
o el fruto desollado ante la espiga.
Déjame recordarte dónde me ahogué de niño
y por qué hace brillar mi sangre la tristeza.
O déjame tirado en la banqueta, cubierto de periódicos,
mientras la nave de los locos zarpa
hacia las islas griegas.

Francisco Hernández.

lagartija dijo...

un abrazo fuerte desde el balcón de mi tristeza, donde la soledad, cuyo rostro afilado corta el aire, fuma un cigarrillo y hace aros con el humo de mis días. te quiero...

Lu García dijo...

Tambien te quiero, no quiero ni imaginarme qué hubiera sido de mí sin tu compañía, gracias por estar, gracias por las risas y gracias por ayudarme a ver mis opciones. Ya elegí una a ver qué pasa.

Valeria dijo...

Lamentablemente así es esto, cuando ves al horizonte y ese "para siempre" parece tan lejano...

Las palabras se las lleva el viento y la soledad las recoge para recordártelas y burlarse de tí cuando ya todo ha terminado.

Un abrazotototote y te cuidas mucho.

lagartija dijo...

estoy contigo pequeña, y qué bueno que te diste chance de reír de mis burradas, jejeje. la risa limpia el alma e ilumina los ojos. a ver si el sábado armamos plan desde temprano, no? ya luego te paso a dejar al péndulo... y gracias a ti por compartir conmigo tu compañía =)