Inicio esta crónica poco después de las dos de la tarde, hace un rato que volví a la realidad pero mamá, Milo y yo disfrutábamos un rato de sol invernal.
Una vez más me he convertido en guajolote, no a la usanza de las leyendas veracruzanas sobre las brujas, sino en el más puro sentido Albarrán: quedarse donde le agarre la noche...
Anoche el guajolotito (mote con el que tendré que lidiar todo el fin) volvió a vibrar en el fondo... ustedes saben a qué me refiero. Todo lo que viví esas últimas horas, se podría resumir en dos palabras: noche d-e-l-i-r-a-n-t-e.
Justo ahora me asalta la duda si sobreviví, ya que no tengo cruda, ni hambre, pero sí unas GANAS tremendas de escribir. Además eso de resumir es lo que menos pienso hacer, así que: señoras y señores, están ante la post más larga que jamás escribiré, pues no pienso omitir ningún detalle.
Como no sé por donde empezar, tendré que hacerlo cronológicamente:
Ya me quiero ir...
Alrededor de las seis de la tarde me di cuenta que me quedaba muy poco tiempo y mucho trabajo por hacer, porque como todos los días me la pasé enviando mails y “chateando”. Así que, como en mis mejores tiempos de final de semestre, puse en práctica mi conocida y patentada técnica de lectura rápida de comprensión (ajá!) y con un poco de actividad eléctrica en mi cerebrito logré terminar algo coherente para las siete y media.
Y me di a la fuga, pues la banda esperaba...
Cual Vive Latino...
Un cartel bastante extenso Hugo, Monocordio, San Pascualito, La Barranca, todos metidos en un Cultural Roots que no estaba ni lleno ni vacío. Zona Vip donde uno puede chelear echado tranquilamente viendo la banda de lejitos (ahhhh!), y por supuesto, departir con los músicos e invitados igual de ”vip” que se dejaran caer.
Hugo, se trepo a rockear chido interpretando varias rolitas cuya temática se viaja por ahí del amor-fútbol-desamor, una de esas complejas tramas que sólo en nuestros días se pueden ver. Como datito curioso, se llaman Hugo sin el Sánchez pero se cambiarían el nombre en caso de que el susodicho se convirtiera en D.T. de Chivas, según comentó posteriormente el guitarro de la banda, quien como muchos jaliscienses, para con el Atlas.
Si no han escuchado a Hugo en Reactor imagínense a una voz parecida a la de Alex Sintek y luego póngale rock sencillo pero con emoción.
La nena ReBeL
Una vez concluida su participación los integrantes regalaron dos playeras pequeñas, la primera al azar, pero la segunda, (una playera blanca con el triangulo de pumas y una silueta singular en el centro, algo así como una leyenda puma con ricitos y la palabra HUGO hasta abajo) la iban a regalar a una niña de pumas. Inmediatamente en un sector del publico varios levantaron las manos señalando a una niña que gustosa mostró su colección de pulseras azul y oro, obviamente la niña traía porra. Bueno pa’ no hacer largo el cuento, hace un chingo que no me ponía nada blanco. Se agradece, sobre todo por aquello de los partidos a rayo de sol.
Monocordio
Presentando su segundo disco en el que definitivamente una canción te suena a otra canción (de Cerati o de Fito, tal vez) el Monocordio se discutió con un buen de rolitas que parecieran sonar a otros, pero no, tan solo evocan. Al menos para una iniciada en su música como yo, cada una de las rolas suenan geniales y con un estilo perfectamente definido. Sobresalen tres cosas: 1. La enjundia de Fernando Rivera Calderón que se pasea por un repertorio de rolas pensadas para decir algo y hacer sentir más. 2. El bataco, músico invitado quien es un perfecto ejemplo para la frase, “darle con huevos, pero sabroso” (quien grabo en el disco fue Luis Alberto Ledezma, no sé si esta vez toco él mismo.) 3. Y la reminiscente rola “ Yofo”. Muy , muy, recomendable. Hasta pedimos otra, otra... y nos la tocaron luego, luego.
Pascuales y pascualazos
Tocó el turno a Pascual Reyes y compañía, quienes sabedores de su jale, se dieron gusto en el escenario. La voz y el sentimiento de Pascual hace patente que para sufrir es bien importante tener power y estilo. Y vaya que calentaron el escenario, pues la gente coreaba las canciones y se aguantaban como los machos pa’ no llorar.
La cerveza corría y corría, en el lugar se veían sembradas montones de botellas, el ambiente era de lo mejor.
Casí me olvido, cuando posteriormente José Manuel Aguilera llamó? al escenario a Pascual, quien estaba entre el público, realizó una maniobra poco digna de olímpicos y zaz!. Pero eso no impidió que gustoso se subiera a cantar con los barrancos.
Blogósfera
Para estas alturas ya estaba reunida toda la banda barranqueña, Lagartija, Francisco ,Carol, Gilberto, Verónica y quien posteriormente sería bautizado como el Iniciado Renegado.
Pero Lagartija traía bonus: Esparta, a ellos los conocí a través de sus blogs, a la primera gracias a LB y al segundo gracias a la primera. La situación chida en este caso fue que sin que Esparta me conociera más que por referencias de Lagartija, al encontrarse a Aguilera por casualidad, y sabiendo de mi admiración por él, le pidió que le autografiara su boleto, para mi!!!
Razón por la cual le pedí a Lagartija que nos presentara, para agradecerle y luego resultó que al leer el blog de otro de sus cuates es posible que coincidamos para una fecha del maratón Guadalupe-Reyes. Y pues ni modo Salud!!
Y por si estás leyendo esto ¡Gracias Esparta!
Otro detalle curiosito es que Francisco, nos conoció a Lagartija y a mí por los blogs. Buscando adivinen qué? Pues almas humanas (o gatunas) despeñadas en esta barranca.
Posada rockera
Yo creo que no era la intención, pero por el ambiente que se cargaba el Roots, las bandas terminaron considerando la velada como la primer posada. Y ni quien diga no.
El Fluir.
Y nuevamente nos despeñamos. Uno no puede escuchar un disco o ver en vivo a La Barranca y seguir siendo el mismo. Hay algo que muta, algo que estalla.
Me queda claro que, si estos cuatro señores músicos toman el escenario, es para divertirse haciendo lo que mejor hacen y lo que más les gusta.
No es necesario, pero acotaré que todos los ahí presentes éramos presas del júbilo, que se cantó, brincó y se sintió cada rola sin límite. Y me sucedió algo que nunca me había sucedido: con Estallido Interno, estallaron unas cuantas lágrimas en mis ojos. Depre navideña, las ausencias, las nostalgias? No lo sé, fue algo que se dio de manera sorpresiva, como sorpresivamente dejaron caer la rola, y contrario a mi costumbre, las dejé fluir, cómo resistirse, cómo parar si luego venía Zafiro?
Luego de tocar Ser un destello ligada con La Barranca, se despidieron, sabiendo que tenían que volver, que somos capaces de pedir que vuelvan innumerables veces. Tocaron La Rosa, junto con Pascual y luego de otro intento por bajarse, tocaron El cinturón de Orión y remataron con Día Negro.
Tiempo después Aguilera preguntaría cómo era eso de despeñarse, estar en el fondo, a lo que Francisco y yo contestamos: si te dejas caer, es por puro gusto y te quedas ahí por puro gusto.
Aunque usté no lo crea
(la neta yo todavía no).
La costumbre es saludar después de la tocada, los camerinos? del Roots son del tamaño de una cáscara de nuez, y sin embargo ahí había una multitud, monocordios por allá, pascuales por acá, y ellos cuatro también.
- Dónde has estado? Me pregunta José Manuel con una sonrisa.
- Aquí he estado siempre. Le contesto totalmente extrañada por la familiaridad con la que me trata. (Si, si, si también estaba eufórica por dentro, todavía no me acostumbro)
Una vez más me he convertido en guajolote, no a la usanza de las leyendas veracruzanas sobre las brujas, sino en el más puro sentido Albarrán: quedarse donde le agarre la noche...
Anoche el guajolotito (mote con el que tendré que lidiar todo el fin) volvió a vibrar en el fondo... ustedes saben a qué me refiero. Todo lo que viví esas últimas horas, se podría resumir en dos palabras: noche d-e-l-i-r-a-n-t-e.
Justo ahora me asalta la duda si sobreviví, ya que no tengo cruda, ni hambre, pero sí unas GANAS tremendas de escribir. Además eso de resumir es lo que menos pienso hacer, así que: señoras y señores, están ante la post más larga que jamás escribiré, pues no pienso omitir ningún detalle.
Como no sé por donde empezar, tendré que hacerlo cronológicamente:
Ya me quiero ir...
Alrededor de las seis de la tarde me di cuenta que me quedaba muy poco tiempo y mucho trabajo por hacer, porque como todos los días me la pasé enviando mails y “chateando”. Así que, como en mis mejores tiempos de final de semestre, puse en práctica mi conocida y patentada técnica de lectura rápida de comprensión (ajá!) y con un poco de actividad eléctrica en mi cerebrito logré terminar algo coherente para las siete y media.
Y me di a la fuga, pues la banda esperaba...
Cual Vive Latino...
Un cartel bastante extenso Hugo, Monocordio, San Pascualito, La Barranca, todos metidos en un Cultural Roots que no estaba ni lleno ni vacío. Zona Vip donde uno puede chelear echado tranquilamente viendo la banda de lejitos (ahhhh!), y por supuesto, departir con los músicos e invitados igual de ”vip” que se dejaran caer.
Hugo, se trepo a rockear chido interpretando varias rolitas cuya temática se viaja por ahí del amor-fútbol-desamor, una de esas complejas tramas que sólo en nuestros días se pueden ver. Como datito curioso, se llaman Hugo sin el Sánchez pero se cambiarían el nombre en caso de que el susodicho se convirtiera en D.T. de Chivas, según comentó posteriormente el guitarro de la banda, quien como muchos jaliscienses, para con el Atlas.
Si no han escuchado a Hugo en Reactor imagínense a una voz parecida a la de Alex Sintek y luego póngale rock sencillo pero con emoción.
La nena ReBeL
Una vez concluida su participación los integrantes regalaron dos playeras pequeñas, la primera al azar, pero la segunda, (una playera blanca con el triangulo de pumas y una silueta singular en el centro, algo así como una leyenda puma con ricitos y la palabra HUGO hasta abajo) la iban a regalar a una niña de pumas. Inmediatamente en un sector del publico varios levantaron las manos señalando a una niña que gustosa mostró su colección de pulseras azul y oro, obviamente la niña traía porra. Bueno pa’ no hacer largo el cuento, hace un chingo que no me ponía nada blanco. Se agradece, sobre todo por aquello de los partidos a rayo de sol.
Monocordio
Presentando su segundo disco en el que definitivamente una canción te suena a otra canción (de Cerati o de Fito, tal vez) el Monocordio se discutió con un buen de rolitas que parecieran sonar a otros, pero no, tan solo evocan. Al menos para una iniciada en su música como yo, cada una de las rolas suenan geniales y con un estilo perfectamente definido. Sobresalen tres cosas: 1. La enjundia de Fernando Rivera Calderón que se pasea por un repertorio de rolas pensadas para decir algo y hacer sentir más. 2. El bataco, músico invitado quien es un perfecto ejemplo para la frase, “darle con huevos, pero sabroso” (quien grabo en el disco fue Luis Alberto Ledezma, no sé si esta vez toco él mismo.) 3. Y la reminiscente rola “ Yofo”. Muy , muy, recomendable. Hasta pedimos otra, otra... y nos la tocaron luego, luego.
Pascuales y pascualazos
Tocó el turno a Pascual Reyes y compañía, quienes sabedores de su jale, se dieron gusto en el escenario. La voz y el sentimiento de Pascual hace patente que para sufrir es bien importante tener power y estilo. Y vaya que calentaron el escenario, pues la gente coreaba las canciones y se aguantaban como los machos pa’ no llorar.
La cerveza corría y corría, en el lugar se veían sembradas montones de botellas, el ambiente era de lo mejor.
Casí me olvido, cuando posteriormente José Manuel Aguilera llamó? al escenario a Pascual, quien estaba entre el público, realizó una maniobra poco digna de olímpicos y zaz!. Pero eso no impidió que gustoso se subiera a cantar con los barrancos.
Blogósfera
Para estas alturas ya estaba reunida toda la banda barranqueña, Lagartija, Francisco ,Carol, Gilberto, Verónica y quien posteriormente sería bautizado como el Iniciado Renegado.
Pero Lagartija traía bonus: Esparta, a ellos los conocí a través de sus blogs, a la primera gracias a LB y al segundo gracias a la primera. La situación chida en este caso fue que sin que Esparta me conociera más que por referencias de Lagartija, al encontrarse a Aguilera por casualidad, y sabiendo de mi admiración por él, le pidió que le autografiara su boleto, para mi!!!
Razón por la cual le pedí a Lagartija que nos presentara, para agradecerle y luego resultó que al leer el blog de otro de sus cuates es posible que coincidamos para una fecha del maratón Guadalupe-Reyes. Y pues ni modo Salud!!
Y por si estás leyendo esto ¡Gracias Esparta!
Otro detalle curiosito es que Francisco, nos conoció a Lagartija y a mí por los blogs. Buscando adivinen qué? Pues almas humanas (o gatunas) despeñadas en esta barranca.
Posada rockera
Yo creo que no era la intención, pero por el ambiente que se cargaba el Roots, las bandas terminaron considerando la velada como la primer posada. Y ni quien diga no.
El Fluir.Y nuevamente nos despeñamos. Uno no puede escuchar un disco o ver en vivo a La Barranca y seguir siendo el mismo. Hay algo que muta, algo que estalla.
Me queda claro que, si estos cuatro señores músicos toman el escenario, es para divertirse haciendo lo que mejor hacen y lo que más les gusta.
No es necesario, pero acotaré que todos los ahí presentes éramos presas del júbilo, que se cantó, brincó y se sintió cada rola sin límite. Y me sucedió algo que nunca me había sucedido: con Estallido Interno, estallaron unas cuantas lágrimas en mis ojos. Depre navideña, las ausencias, las nostalgias? No lo sé, fue algo que se dio de manera sorpresiva, como sorpresivamente dejaron caer la rola, y contrario a mi costumbre, las dejé fluir, cómo resistirse, cómo parar si luego venía Zafiro?
Luego de tocar Ser un destello ligada con La Barranca, se despidieron, sabiendo que tenían que volver, que somos capaces de pedir que vuelvan innumerables veces. Tocaron La Rosa, junto con Pascual y luego de otro intento por bajarse, tocaron El cinturón de Orión y remataron con Día Negro.
Tiempo después Aguilera preguntaría cómo era eso de despeñarse, estar en el fondo, a lo que Francisco y yo contestamos: si te dejas caer, es por puro gusto y te quedas ahí por puro gusto.Aunque usté no lo crea
(la neta yo todavía no).
La costumbre es saludar después de la tocada, los camerinos? del Roots son del tamaño de una cáscara de nuez, y sin embargo ahí había una multitud, monocordios por allá, pascuales por acá, y ellos cuatro también.
- Dónde has estado? Me pregunta José Manuel con una sonrisa.
- Aquí he estado siempre. Le contesto totalmente extrañada por la familiaridad con la que me trata. (Si, si, si también estaba eufórica por dentro, todavía no me acostumbro)
Luego de saludar a los que íbamos juntos, José Manuel llama a Chema y Alonso diciéndoles que la fiesta estaba afuera y sale de los camerinos.
Veo a Fernando Monocordio, lo saludo y felicito porque su disco esta poca madre.
Salgo junto con Gilberto de los atascados camerinos y todo lo demás sucede demasiado rápido.
Aguilera está a unos pasos, saluda a quien sabe quien y luego me ve, me acerco, toma mi mano y camina para atravesar todo el Roots !!!!!!!!.
Con el set de la tocada en mano, le comento (no balbuceé, ya estoy progresando) que en la próxima tocada sería mejor que para hacer el set de rolas, usaran hojas tamaño oficio y la llenaran. Y entonces su risa y luego la mía diciéndole que nunca es suficiente.
Otros más lo saludan acá y allá, y como no queriendo acaparar, Gilberto y yo aprovechamos para comprar las playeras bordadas del fluir. Luego de un rato, regreso con JM para que me firme el set. Nos vemos pronto fueron sus palabras.
Más rocanrol
Brujo…..
(Paréntesis para agradecer a Francisco por haber nacido, por ser tan psyco y por todo, todo, todo...)
ENSOÑACIONES ETÍLICAS
El mariachi cósmico quiere bailar
JM :
- Porque no pones algo para bailar, ustedes tres armen algo, no? Como bailando por... - por un pomo- (gritan por ahí)...
AL:
- No manches, en esta computadora no hay nada wey, nada...
El fantasma de André
Lu:
- Siempre se piensa en LB con un antes y un después. Yo creo que no. Si se tocan rolas del Fuego, son rolas de LB de ahora, suenan como son ahora y ya.
JM :
- Si pero eso no se asimila fácilmente, de hecho, al principio tocábamos a dos baterías, André y yo, porque no se sabía qué iba a pasar y las reacciones de la gente. Hasta dijeron que si empezaban a aventar botellazos, había que aguantar.
Lu:
- Sí, pero era casi innecesario, llegaste para hacer las cosas como se tenían que hacer.
Los rockeros también viven “cuentos de hadas”
JM:
- Cuando me preguntaba en qué grupo actual de rock podría tocar, hacer algo verdadero, chingón, wey... Pues sólo en La Barranca. Y aquí estoy. Y eso es la mitad wey, la mitad de todo lo que tengo que dar.
La chingonería de andar fluyendo
JM:
- Este es el mejor disco que hemos hecho, yo no habría hecho otro. Hacer otro Denzura, ni madres.
Lu:
- No manches, la primera vez que lo escuche, Hendrix me movió, me puso en la madre. Pero a la segunda dije, cómo no escuché antes así a Zafiro; y a la tercera a Si acaso hay vida... y ahora mi favorita es El fluir.
JM:
El disco es una cosa bien chingona, tiene muchos trucos. Esa era la idea.
JM:
Pues sí y algunos dicen que la chingona es Una tarde en la vida y otros que Orión.
Pasión futbolera
JM:
- A mí me apasiona el fútbol, alguna vez edité una revista completamente dedicada a ello. Porque no puedes quedarte sólo en la música, te llama hacer otras cosas. Aunque para mí la música es como el 80 por ciento de mi vida.
Es difícil ser barranco?
JM:
- No manches wey, en la audición estos weyes se portaron de lo más mamones, con sus poses. Y la neta yo le puse en la madre a las rolas, porque quise, luego lo hice como querían que lo hiciera, y ahora lo hago como debe ser.
Esqueletos
JM:
-JM es la columna vertebral de todo esto, los demás somos lo que lo envuelve, lo que lo complementa...
Renegado:
- Sí, pero sin complemento no se sostiene el esqueleto...
Y como siempre el lenguaje
JM:
- Me caga que las bandas de aquí canten en inglés... Cuando el español es de lo más chingón...
Anís:
- Por supuesto, los poetas españoles tienen toda esa emoción y pasión y sencillez ...
JM y Lu (casi al unísono):
- Y Whitman?
Tú sabes de lo que te estoy hablando
Lu:
- JM y AL escriben en diferentes partes, AL también ha escrito alguna vez en la página, y tú?
JM:
- Pues también lo hago, escribir es también una parte importante en mi vida, me fascina, como la música...
Lu:
- Siempre he pensado que lo que lees y la música que escuchas, te hace ser quien eres...
JM:
- Tú sabes de lo que te estoy hablando.
Tarea
JM:
- Tienes que leer a Francisco Hernández...
Lu:
- Va, pero tu lees a Miguel Guardia...
[Si ya no recuerdo exactamente las palabras dichas en mis sueños, todo es culpa de un tal cuervo y de un tal jimador]
>>>°<<<
Gracias:
JM- AL-JM-AL
Francisco
Gilberto
Lagartija
i (a la distancia)
Verónica
Renegado
JM- AL-JM-AL
Francisco
Gilberto
Lagartija
i (a la distancia)
Verónica
Renegado
4 ecos:
Es siempre un honor y un placer encontrar almas tan chingonas que comparten algo más que el gusto por la música de una gran banda.
no manches Lu... ahora sí me sacaste una lagrimita -más no se vale, estoy en el trabajo-... qué fregona manera de compartir esto, me hiciste sentir ahí...
te mando un abrazote
i
(a la distancia... a la maldita distancia, que nunca será barrera)
Hola Lú, jajajaja, pues si te interesa yo tengo libros de Francisco Hernández, es uno de mis poetas favoritos, sino el favorito. No sabía que le gustaba a JM, lo que son las cosas. Y gracias a ti por estar.
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